miércoles, 11 de diciembre de 2013

Sungenis ya tiene la película


          En la próxima Primavera se va a proceder a anunciar al mundo científico un descubrimiento extraordinario, pero a diferencia de lo que suele ser habitual, esta vez no se utilizarán  revistas especializadas sino una producción fílmica, cuyo titulo es “The Principle”, con todos los ingredientes espectaculares del más puro estilo Hollywood. La razón para este inusual anuncio es que todos los anteriores intentos de anunciar el descubrimiento, mediante artículos, publicaciones o libros divulgativos, han resultado más bien estériles pues han chocado con un muro inquebrantable erigido por el paradigma dominante, muy resistente a caer derribado. Veremos si son capaces de resistir a este embate. 

lunes, 28 de octubre de 2013

La Tercera Vía : Creacionismo sin complejos

 
    Es un hecho fácilmente comprobable que en todos los encuentros de los feligreses de la Iglesia, a nivel de parroquia, ya sea para rezar diariamente el rosario, o viacrucis, novenas, misas , etc. están compuestos mayoritariamente por mujeres. La desproporción entre hombres-mujeres asistentes suele sobrepasar normalmente el 90 % a favor de ellas. La cantidad de varones adultos que asisten asiduamente a estos actos religiosos suele ser reducidísima, apenas tres o cuatro por cada centena de mujeres. ¿Cuál es la causa de esta desproporción?  La mayoría de ateos e increyentes suelen dar una torpe respuesta a este interrogante. En primer lugar meten todo tipo de creencias religiosas en un mismo ‘saco’, a lo que llaman “religiones”, sin importarles que algunas de ellas tienen un origen y fin perverso, incluso satánico, y luego aseguran que las “religiones” –sin excepción- son simplemente una construcción artificiosa humana que sirven de consuelo a las personas débiles, especialmente a las mujeres, niños, ancianos y enfermos severos. Para ellos “la religión es cosa de los débiles y los cobardes”.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

YouCat distorsiona la Doctrina Católica


 Nuevamente hablamos aquí del YouCat1, un catecismo lanzado desde el Vaticano en Abril de 2011 y que se ha distribuido a los jóvenes con ocasión de los eventos de la JMJ. Cuando se publicó, el cardenal Stanislaw Rylko, Presidente del Consejo Pontificio para los Laicos, comentó que este catecismo dirigido a los jóvenes había sido traducido a seis idiomas, y explicó que Youcat “traduce el contenido del Catecismo de la Iglesia Católica con rigor y fidelidad, en un  lenguaje adaptado a los jóvenes…Su objetivo es guiar a los jóvenes hacia un conocimiento más profundo de su fe”.

 Cualquier esfuerzo que se haga para catequizar a los jóvenes es muy loable, desgraciadamente el Youcat contiene tantos y tan graves defectos y errores, que más que enseñar la doctrina tradicional católica lo que hace es distorsionarla. Consecuentemente,  mientras no se corrijan estas graves deficiencias, el Youcat no sirve para fortalecer la fe de los jóvenes, sino más bien para hacer que la pierdan.  En la web católica de noticias “Faithful Answers”2 se ha habilitado un enlace para que los católicos solicitemos al Papa la revisión del Youcat, o en su caso su sustitución por el Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, algunos incluso piden el Catecismo de Trento. Aquí vamos a tratar aquellos errores y deficiencias concernientes a la Creación, a la interpretación del Génesis y a la fiabilidad de la Biblia.

sábado, 18 de mayo de 2013

Movimiento retrogrado de Marte ¿Prueba de qué…?

 Se llama movimiento retrogrado de un planeta a la peculiar “vuelta hacia atrás y luego adelante que realiza un planeta en su trayectoria aparente tal como la vemos desde nuestra posición en la Tierra.



 Hasta hace poco tiempo, el movimiento retrogrado de los planetas, el de Marte en particular, era considerado en libros y páginas web como una prueba del Heliocentrismo. Últimamente parece que se está abandonando esta convicción, supongo yo que será ante la proliferación de gráficos y animaciones desde la perspectiva del modelo de Tycho modificado que clarifican adecuadamente este torpe error.  Para los que todavía me escriben preguntándome por este fenómeno les he preparado esta secuencia de imágenes que creo que son suficientemente esclarecedoras. Primeramente desde la perspectiva heliocéntrica, la Tierra presuntamente se movería por su órbita y Marte por la suya. Observando Marte frente al fondo de estrellas lejanas, en ciertos momentos se le ve trazar ese doble cambio en forma de ‘S’, que trasladado al plano serían epiciclos completos.
 

 

 

Habitualmente los libros y webs añadían después una crítica sobre cómo al modelo geocéntrico (de Aristóteles) le resulta imposible explicar este fenómeno. Lo que evitaban era hacer las modificaciones oportunas al modelo geocéntrico para que en éste sí muestre movimientos retrogrados.  Observemos el fenómeno desde la perspectiva del modelo de Tycho Brahe modificado, con la Tierra absolutamente fija.
 
 

 
 
 
Si comparamos las dos ‘animaciones’ apreciamos que la configuración posicional de los tres astros (S, T, M) es idéntica en ambos modelos.  Y como ya comentamos en la anterior entrada, al no estar pintadas las órbitas en el firmamento -algunos se asombrarán por ello :-)-,  los dos modelos se presentan indistinguibles observacionalmente.  Quizás esto haga meditar a algunos críticos que pretenden rechazar al geocentrismo con razonamientos del tipo “El movimiento de la Tierra, o del sol, ya lo habrán visto los astrónomos desde sus telescopios, o los astronautas desde su Estación Espacial, o la habrán fotografiado los sondas espaciales en sus viajes,…”.  Por supuesto que sí, pero de esas observaciones desnudas no se puede inferir ninguna prueba determinante de uno de los dos modelos en disputa.

¿Quiere esto decir que sería lícito defender un universo acéntrico?, o sea, el universo desprovisto de centro (c.d.g) tal como lo supone la Relatividad Especial o el Heliocentrismo Creacionista. No. Principalmente porque eso conlleva algo tan grotesco como el panteísmo, la infinitud del universo. Y es que el universo, que no es una divinidad,  debe considerarse necesariamente finito, ya que ninguna criatura puede ser infinita. Como ejemplo de esta verdad veamos algunos argumentos basados en las Escrituras:

  -  El universo tuvo un comienzo en el tiempo, fue creado (Gen 1-2; Col 1,16).
  -  Fue creado con limitaciones. El universo no es una divinidad.  Dios lo sobrepasa ampliamente ( I Re 8,27).
  -  Sólo Dios es Infinito y Eterno (Gen 21,33).
  -  Toda criatura, en contraste con Dios creador de todo, es finita y limitada en el tiempo (Sal 90,2).
  -  Los cielos (el universo entero) y la tierra tienen fecha de caducidad. Dios los renovará por completo en su momento (Isa 65, 17; II Pe 3,10-13; Ap 21,1).


Pero para los que buscan pruebas físicas imperiosas ¿qué deberían hacer?. Probablemente apoyarse en un elemento adicional al del conjunto total de astros lumínicos. Ya que no es posible inferir algo del solo conjunto de astros y sus juegos de luces y sombras, ¿por qué no introducir el éter, que es el tablero por donde se mueven las fichas?.




 
 


 

domingo, 14 de abril de 2013

Identidad cinemática de modelos helio y geocéntrico


Muy pronto va a salir una película, “The Principle”, que en estos momentos están completando desde la “Catholic Apologetic International Publishing” dirigida por Robert Sungenis, donde podréis ver animaciones nunca vistas, en ella se destaparán todos los engaños del Copernicanismo, y se mostrarán con todo lujo de detalles toda la cantidad de pruebas que evidencian que el universo es geocéntrico. Por ahora, ayudados por unos modestos gráficos, vamos a ver la analogía entre los modelos de Newton y Tychonico.
Las imágenes de la izquierda representan el modelo  heliocéntrico Newtoniano, con el sol (amarillo) inmóvil, y algunos planetas con sus órbitas: Mercurio (verde), Venus (blanca), Tierra (azul) y Marte (rojo). Las correspondientes imágenes de la derecha muestran el modelo Tychonico, con la Tierra fija y el Sol circulando por la órbita amarilla, y los verdaderos planetas circulando el Sol. Observad claramente que si prescindimos de las órbitas la configuración geométrico-espacial es idéntica.  Ambas situaciones son completamente indistinguibles, puesto que en la realidad esos círculos (o elipses), las órbitas, no aparecen pintadas en el espacio, o sea, son invisibles a las observaciones. Desde hace varias generaciones nos han adiestrado a considerar como cierto “per se” el heliocentrismo implícito de Newton, por eso las imágenes de la izquierda nos resultan tan familiares, mientras que nuestro cerebro es reacio a aceptar las de la derecha.  Y sin embargo son idénticas las configuraciones.
Fecha: 26 de Mayo 2013
 
 
Fecha:  25 de Junio 2013
 
  Siguen siendo idénticas las configuraciones de los cuerpos si añadimos elementos adicionales como podrían ser asteroides, cometas, etc. Tal como se puede apreciar en la imágenes siguientes:

 
 

   Comprendiendo esto, está claro que  no tiene sentido hacer afirmaciones categóricas como las que aquí han hecho algunos participantes heliocentristas, afirmaciones tales como éstas:
1.  El modelo heliocéntrico se ha utilizado con éxito para conducir vehículos espaciales a los más variados lugares del Sistema Solar, esto no se podría hacer si se utilizara el modelo geocéntrico Tychonico.
  Falso. Como se puede adivinar observando las imágenes de arriba, la trayectoria que debería seguir un vehículo para llegar a un punto cualquiera P, es la misma independientemente del modelo que fuese el verdadero en el universo real. Es más, la NASA,  JPL, etc. utilizan el modelo geocéntrico porque el software del GPS lo tienen diseñado específicamente para este modelo, la única forma viable de controlar con fiabilidad las posiciones de los cuerpos en el espacio.
2.  Para el sistema heliocéntrico se han desarrollado modelos matemáticos de simulación numérica ¿dónde están los modelos de simulación para el sistema geocéntrico?.
     Estos modelos no son ni helio ni geocéntricos. Lo único que hacen es establecer la posición aproximada de una serie de coordenadas para puntos en movimiento, y para este caso sí que es indiferente el origen de coordenadas. Pero ¡cuidado! No hay que confundir un modelo matemático –que es un recurso para hacer cálculos- con el sistema real.
3.  Hay en estos momentos satélites cumpliendo importantísimas misiones, tales como ACE, GeoTail, SOHO, STEREO… que han sido colocados en la posición precisa según consideraciones exclusivamente heliocéntricas.
    Que no. En el mejor de los casos –para el heliocentrismo- se podrían haber colocado en su posición considerando cualquiera de los dos modelos, pues ambos son cinemáticamente idénticos, pero como acabamos de decir, el software del GPS está diseñado para operar desde el marco de la Tierra fija, pues parece ser que no es viable hacer el control desde cualquier otro.
4.  No aparecen fases en el planeta Venus en el modelo geocéntrico.
   Esto además de falso es ridículo. Y que conste que esta afirmación me la lanzó hace unos días un profesor, compañero en la universidad, y probablemente muchos la repiten sin haber reflexionado sobre lo que están diciendo. El propio Stephen Hawking, en su obra “Breve Historia del Tiempo”, también comete este error de principiantes. Lo cierto es que en el modelo geocéntrico de Ptolomeo –del siglo II-  no aparecen fases en Venus, aparentemente, ya que las distancias interplanetarias no estaban bien establecidas. Pero Galileo y Kepler, con la ventaja de sus flamantes telescopios, al detectar estas fases de Venus lo que deberían haber hecho es una leve modificación al modelo de Ptolomeo, concretamente colocar la trayectoria del Sol como deferente de todos los planetas, y entonces hubieran hecho el descubrimiento de su vida, así ¡el modelo de Ptolomeo se convierte en el de Tycho Brahe!, y en éste sí hay fases de Venus.  Desgraciadamente Kepler –y Galileo en ese tiempo- actuaban contra el conocimiento de la Astronomía, y no en pro de ella. Y ¡lo que son las cosas!... resulta que las fases de Venus aparecen hoy como una prueba más del geocentrismo, ya que la llamada “dicotomía de Venus” (el efecto de Schröter) relacionado con estas fases venusinas, sólo ha podido explicarse por medio del geocentrismo (ver http://www.geocentricuniverse.com/Schroter.htm).
5.  El concepto mismo de sistema de coordenadas utilizado en la Física hace imposible definir un marco en reposo absoluto.
Falso. Lo que sí es parcialmente cierto es la afirmación que ciertos modelos físicos, o ciertas hipótesis (como la teoría de la Relatividad General), imposibilitan definir un marco en reposo absoluto. Pero eso no hace imposible al geocentrismo, pues la Relatividad General no es más que una hipótesis entre las demás, que de ninguna manera tiene la categoría de verdad absoluta… sino más bien lo contrario. Aunque ya sé que algunos consideran a Albert Einstein como una especie de divinidad a la que nadie puede contradecir.

lunes, 1 de abril de 2013

Los datos de la sonda Planck 2013 apuntan a un universo... ¡geocéntrico!

El satélite Planck de la ESA

Ya hace algún tiempo comentábamos en este blog los tendenciosos titulares que colocan algunos directores de revistas científicas a los artículos relacionados con descubrimientos, en un intento de dirigir la conclusión de los lectores hacia la línea de su paradigma favorito, que normalmente es el del Big-Bang….cuando Marcus Chown descubrió con asombro que los datos de la sonda WMAP indicaban el alineamiento aparente de la radiación CMB y nuestra eclíptica, ¿cuál pensáis que fue el titular de su artículo en New Scientist?... quizás «La CMB aparece alineada con la Tierra». No. ¿Quizás este otro... «Aparente Correlación entre la CMB y el Sistema Solar»?. Tampoco. En realidad, Chown tituló su artículo así: «Axis of Evil Warps Cosmic Background»[1]. Otro caso, aunque se podrían poner aquí mil ejemplos más, adivinad qué escribió Edwin Hubble cuándo realizó el asombroso descubrimiento de los redshifts de las galaxias lejanas, que era tal como si todas las galaxias se alejaran de nuestra posición central del universo... quizás escribió «Podemos estar en el centro». No. O quizás más cauto dejó escrito: «podríamos estar en una posición privilegiada, aunque puede haber una explicación alternativa». Tampoco. En realidad escribió[2]: «...Tal condición podría implicar que nosotros estamos ocupando una posición única en el universo, análogo, en algún sentido, al antiguo concepto de una Tierra central ..., No se puede demostrar la falsedad de esta hipótesis, pero es rechazable y únicamente podría ser aceptada como último recurso... Así que nosotros desdeñamos esa posibilidad... llegar a la conclusión de una localización privilegiada para nuestra tierra debe ser evitada a toda costa... tal posición favorecida es intolerable... De esta manera, con la intención de restaurar la homogeneidad, y escapar del horror de una posición única... (el universo) debe ser compensado por una curvatura espacial».

Hace unos días, el 21 de Marzo pasado, ha salido otra vez a los medios de comunicación un titular cargado de este cinismo. Fue cuando la Agencia Espacial Europea  (ESA) dio a conocer los datos de la sonda espacial Planck, que desde 2009 había estado recopilando datos de la Radiación remanente Cósmica de Microondas (CMB), la noticia original decía en inglés: “Planck Reveals an Almost Perfect Universe”, o sea, “(Los datos obtenidos de) Planck revelan un casi perfecto Universo”; donde nosotros estamos remarcando la palabra “casi” que ha sido estratégicamente incluida por la ESA. Tras leer el titular de esta noticia, la mayoría de personas que no conozcan bien la historia de esta radiación CMB habrá sacado la conclusión que, por fin y de manera casi definitiva, los datos de la Planck confirman la teoría estandar del Big Bang. La realidad es bien distinta. Lo que COBE había mostrado en 1989, y la WMAP en 2001, la Planck en este 2013 no ha hecho más que confirmarlo con un grado mayor de precisión, a saber, que nuestro universo no es Copernicano, que no es perfectamente homogéneo ni isótropo, ni siquiera en el tiempo más primigenio de su más remoto comienzo. Los pixels calientes y fríos están distribuidos en el universo de una manera tal que pueden distinguirse direcciones privilegiadas, y sorprendentemente para los científicos del paradigma BigBangismo-Relativismo, estas direcciones están emparentadas con la posición central específica de la Tierra. Clamar alegremente que el universo es ‘casi’ homogéneo e isotrópico sigue la misma ilógica de aquél que iba brincando y gritando que “casi le había tocado el premio gordo de la lotería”. Los datos están ahí contradiciendo claramente aquel lema que Carl Sagan repetía incansablemente en sus lecciones adroctinadoras: “Nos encontramos en un planeta insignificante, en una humilde estrella, situada dentro de una perdida galaxia, escondida en un recóndito lugar del universo”.
El comunicado de la ESA sobre la sonda espacial Planck puede leerse en:

El Director General de la ESA, Jean-Jacques Dordain, manifiesta que:
“La extraordinaria calidad del retrato que Planck ha hecho del Universo infante nos permite retroceder a sus fundamentos más básicos, revelándonos que nuestro modelo de universo se encuentra muy lejos de estar ya completado”.
¿En qué quedamos? , pero ¿no decía el titular que “Planck revela un casi perfecto universo”?.  ¿O es que el ‘casi’ tiene aquí valor destructor como para convertir ‘perfecto’ en  ‘muy imperfecto’? Lo que verdaderamente está ocurriendo es que cuando estas agencias, tanto la NASA como la ESA, encuentran evidencias cósmicas que contradicen las predicciones de su teoría del Big Bang,  lo que hacen es cambiar la teoría paradigmática, haciendo remiendos en ella, de tal manera que así se ajuste a las observaciones. De esta forma siempre pueden decir, que los datos observados, sean los que sean, se adaptan casi perfectamente al modelo del Big Bang. Pueden incluso adelantar las manifestaciones, como hace J.J. Dordain, a los remiendos porque saben que tarde o temprano estos llegarán.

Respecto al análisis de los datos recopilados por la Planck, el famoso astrofísico profesor George Efstathiou de la Universidad de  Cambridge, miembro del equipo científico de la ESA, declara:
“ Uno de los más sorprendentes hallazgos (de la Planck) es que las fluctuaciones de temperatura de la CMB a grandes escalas angulares no concuerda con las que predice el modelo estándar –sus señales no son tan fuertes como se esperaba. Otra sorpresa es la asimetría en las temperaturas medias en los hemisferios opuestos del cielo. Esto va en contra de las predicciones hechas por el modelo estándar sobre que el Universo debería ser perfectamente similar en cualquier dirección que miremos (‘Principio de Copérnico’). Finalmente, un punto frío se extiende sobre una zona de cielo que es mucho mayor de la esperada”.
 En resumen, la homogeneidad e isotropía que necesita la teoría estándar (tanto la Relatividad como el modelo ‘Big Bang’) no aparecen por ninguna parte. La sonda Planck no ha hecho mas que confirmar la presencia en la CMB del eje bipolar (‘the axe of evil’), del cuadripolar y del octopolar que tienen connotaciones claramente geocéntricas. De hecho la asimetría y la presencia del punto frío inesperadamente grande ya se conocían desde la anterior misión de la NASA, la llamadaWMAP[3]. Se trata de lo mismo que ya Marcus Chown descubrió al analizar los datos de la sonda WMAP y que tituló así: «Axis of Evil Warps Cosmic Background». ¿Qué tienen de especial, entonces, los hallazgos de la sonda Planck del 2013?.

 NOTAS:
1.  Marcus Chown, ‘Axis of Evil Warps Cosmic Background’ New Scientist, October 22, 2005. En español "Los Ejes del Mal distorsionan la CMB".
2.   Edwin Hubble, The Observational Approach to Cosmology.
3.  Repasar la entrada del 12 de Octubre de 2010.



domingo, 17 de febrero de 2013

¿Quién tiene que presentar una prueba? ¿El heliocentrismo o el geocentrismo?


 Algunos lo primero que nos piden es: “Presentar una prueba de que la Tierra está fija y no se mueve”.Ante todo hay que aclara el tema: ¿Quién tiene que presentar una prueba?. El Geocentrismo NO.
1.  Desde la instauración de las primeras universidades, hasta la fecha de 1822 en toda Europa (especialmente en España, en la Universidad de Salamanca) el movimiento del sistema solar se enseñó desde la perspectiva geocéntrica (Los Jesuitas –que siempre tuvieron grandes conocimientos de astronomía- utilizaban como tesis el modelo de Tycho Brahe, y no el de Ptolomeo, que en todo caso se usaría ocasionalmente por facilidad de cálculos.
2.  Es falso lo que dicen muchas webs y libros “que Benedicto XIV diera en 1758 el Imprimatur a las obras completas de Copérnico, Kepler y Galileo…” fecha en la cual el Geocentrismo hubiera quedado proscrito. Lo que Benedicto XIV hizo fue establecer un nuevo Indice de libros prohibidos, relajando la anterior prohibición de publicar cualquier libro que “enseñara que la Tierra se está moviendo”, permitiendo que se publicaran libros “enseñando que la Tierra se mueve…siempre que se especifique claramente que ello se está haciendo como hipótesis no como tesis”.  La hipótesis es un artificio para realizar cálculos. La tesis es una afirmación de la realidad. Entra dentro de la lógica utilizarse hipótesis distintas –incluso contradictorias- para diversos cálculos matemáticos de una misma realidad, (por ej.:  Hoy se utiliza la hipótesis. geocéntrica para cálculos de Navegación y la hipótesis contraria, la heliocéntrica, para cálculos de paralaje estelar, cálculo de distancia de cometas, asteroides.  Como prueba que Benedicto XIV no levantó la prohibición de mantener la realidad del movimiento de la tierra está que los libros de Copérnico, Kepler y Galileo siguieron apareciendo en el Nuevo Indice.
3.  Poco antes de 1822 hay dos hechos reseñables. Primero: Isaac Newton había escrito su obra de tres tomos Principia Matemática. (Publicada en 1687). En los dominios de la Iglesia de Roma fue publicada medio siglo después (en Genova 1739) con una “Declaración”:  … Las proposiciones de autor no pueden ser explicadas más que como una hipótesis… Los postulados de Newton no prueban que los cuerpos pequeños tienen que orbitar al masivo (el sol). En realidad ello depende del cdg y si el cuerpo pequeño cae ‘casualmente’ allí. Newton reconoce esto en el tomo III, aunque en general lo ignora, desprecia, se abstiene de considerar ya más esa posibilidad. Hoy día el 99,9 % de alumnos graduados en Física creen que Newton prueba el heliocentrismo… Es falso.
Segundo hecho. Durante varios siglos los astrónomos pensaron que el descubrimiento del paralaje estelar en una estrella demostraba el heliocentrismo. La idea la había sugerido Tycho Brahe, en su modelo no se daba el paralaje (pero en el modelo Tycho Brahe modificado que se defiende en el libro sí lo hay).  Por eso la búsqueda del paralaje, o sea, el desplazamiento aparente de una estrella, ha sido una odisea por parte de heliocentristas de varios siglos. Algunos astrónomos creyeron haberlo hallado en 1641, en 1722, etc.  Todas ellas falsas alarmas. Pero 1818 el matemático y astrónomo Friedrich Bessel con un telescopio muy avanzado y utilizando correcciones e interferometría super-refinada publica su libro "Fundamenta Astronomiae", en el que asegura que ha medido un paralaje para la estrella 61 Cygni (paralaje de sólo 5” de arco). A partir de entonces la comunidad científica protestante consideró cerrada la discusión a favor del heliocentrismo.
4.  Con esto en mente se puede intuir el gran fraude al conocimiento humano que se cometió en el año 1822. Una historia rocambolesca que duró 2 años. En 1820, el canónigo Giussepe Settele solicitó el Imprimatur para su obra “Elementos de Astronomía”, en la que defendía en su tomo II–como tesis- que la Tierra se movía.  El Censor principal se le denegó. Entonces apeló al Papa Pio VII, quien tuvo que llevar el asunto a la Congregación del Santo Oficio, que volvió a denegarlo. Entró en acción la presión por parte de universidades protestantes e intrusos (acusaciones de ‘censura eclesial’, protestas, reclamaciones por parte de la prensa de Alemania, Francia y Holanda). A todo ello, Napoleón había incautado los documentos del Vaticano, especialmente los del caso Galileo. Así, en este estado –que puede llamarse cualquier cosa menos ‘libertad’- en 1822, el Santo Oficio tuvo que dar una tercera respuesta. Los componentes del Tribunal acordaron: «No rehusar la concesión de una licencia para la publicación de obras tratando el movimiento de la Tierra y la estabilidad del Sol, de acuerdo con la opinión general de los astrónomos modernos –que ahora sabemos incorrecta- , en tanto en cuanto no haya otras indicaciones contrarias, sobre la base de los Decretos de la Santa Congregación del Indice de 1757». Que sí los había: la prohibición de tratar el movimiento de la Tierra como ‘tesis’. (Benedicto XIV)
 A mí –aunque no soy jurista- me parece claramente inválida esta concesión. Los letrados deberán decidir. Si es inválida: Seguimos rigiéndonos por los Decretos de Benedicto XIV.
5.  Los experimentos tipo Michelson-Morley, que se han venido realizando desde finales del siglo XVIII, incluyendo los de Aragó, Fresnel, Fizeau, Airy, y Michelson-Morley… en su intento de medir la velocidad Tierra-éter lumínico resultaron negativos (o sea, “No se detecta el movimiento de v=30 km/s que se debería detectar). Sin embargo en el experimento de Sagnac, y en el de Michelson-Gale sí se detecta cierto movimiento de rotación realativo Tierra-éter lumínico… Todo ello compatible con una Tierra fija en el espacio y un éter rotante con toda la estructura del firmamento. Seguimos preguntando: ¿Quién tiene que aportar una prueba positiva el heliocentrismo o el geocentrismo?
6.  Las pruebas antiguas del heliocentrismo, la mayoría de ellas construidas contra el geocentrismo de Ptolomeo, son todas inválidas: el péndulo de Foucault, las fases de Venus, el movimiento retrogrado de Marte, el paralaje estelar, la aberración estelar, etc. Son inválidas porque se pueden igualmente explicar en uno u otro modelo.
7.   Una generación después, a comienzos del siglo XX, los científicos ya emancipados de la prudente guía de la Iglesia, se encontraban ante el horror de tener que dar marcha atrás a la llamada “Revolución de Copérnico”-una revolución de tipo ideológico- y se veían obligados a colocar a la Tierra en el lugar del que le habían quitado, el centro. Pero allí llegó, nadie sabe cómo, Einstein, con la Relatividad y sus no evidentes postulados. No hay éter, la luz tiene la misma velocidad en todos los sistemas, las longitudes se encogen, los tiempos se dilatan, todo cambia, el tiempo absoluto no existe, todo es relativo (hasta la moral). Con ello, Einstein –y sus poderosos mentores- salvaron ese escollo. Ahora el combate lo llevaron al terreno de las Matemáticas: Tú dices que los datos de un experimento muestran que la Tierra está en el centro, y Einstein te responde G = 8 π T, o sea 12000 ecuaciones tensoriales, para sortear esa evidencia sin necesidad de esa condición central. Pero hubo un cientifico, además de filósofo y expresidente de la Royal  Astronomical Society de Londres, respetado en su tiempo por su dominio de esa teoría, que se dio cuenta que tal teoría de Relatividad no es válida (por inconsistente) para describir este mundo, y allí estuvo peleando, ante la incomprensión general, los palos, y el ninguneamiento de sus proclamas. Dejó escrito el libro “Science at the Crossroads”, un libró que intentó durante 20 años no necesitar escribir. Al final ahí está, escrito, disponible en internet.
¿Quién tiene que aportar una prueba positiva el heliocentrismo o el geocentrismo?
Einstein no presentó ninguna (los del eclipse de 1919, el perhelio de Mercurio, etc. son todas inválidas, tal como señalan las investigaciones del profesor Charles Lane Poor).
8.  Finalmente, ¿qué nos muestran los datos astrofísicos recopilados en los últimos 20 ó 30 años?.  Todas las galaxias aparecen alejándose de nuestro lugar de observación – Algunos argumentan: Pero eso es así en todos los puntos debido a la isotropía del Universo-  Pues no, porque la distribución de la radiación de fondo de microondas se ha demostrado ser anisótropa (hasta lo que conocemos ahora). Las galaxias no sólo aparecen alejándose del punto central donde se encuentra la tierra, sino que además su distribución es uniforme alrededor nuestro, el movimiento de alejamiento representaba una dilatación uniforme, como si se movieran en capas concéntricas con centro en la tierra, y velocidades que siempre son múltiplos de 72 km/s. la distribución de los quásares, por ejemplo, sólo tiene una explicación lógica, el geocentrismo, pues están situados en 57 bandas esféricas centradas en la Tierra . Y por si fuera poco esto, también la distribución de otros objetos celestes lejanos, como los estallidos de Rayos Gamma y los BL Lacertae tienen su explicación más lógica en el geocentrismo. También los cúmulos globulares de estrellas, que son conglomerados esféricos de miles de estrellas que se encuentran dentro de nuestra galaxia, están distribuidos con centro en la tierra.
En definitiva, no es el geocentrismo quien tiene que dar una prueba (los experimentos lo dan por sí mismos, la sabiduría de los pueblos lo ha hecho perdurar durante los siglos, los cielos lo proclaman). Son los que defienden el heliocentrismo los que la deberían darla. Hasta la fecha de hoy no han aportado ninguna valida.
 
 

viernes, 1 de febrero de 2013

Libro sobre Geocentrismo




Tengo el gusto de presentar a los lectores de este blog el libro de divulgación cosmologica-teológica “Sin Embargo No Se Mueve”,  en el que hemos colaborado el matemático croata Milenko Bernadic, y yo mismo.  Milenko Bernadic es muy conocido en la web ya que lleva un blog muy popular en Infocatólica, http://infocatolica.com/blog/friocaliente.php, es Doctor en Matemáticas por la universidad de Murcia, es autor de libro "La función de índices de concentración en las distribuciones doblemente truncadas", y coautor de colección de ensayos "Miradas sobre Europa". 

En este libro presentamos el geocentrismo que se defiende en este blog, el mismo que varios científicos católicos actualmente defienden a lo largo del mundo. Se trata de una visión cosmológica olvidada o, más bien, apartada injustamente del saber: que la Tierra no se mueve, es decir, no orbita alrededor del sol (es el sol el que lo hace alrededor nuestro), ni tampoco rota sobre el eje Norte-Sur (es el firmamento como un todo el que lo hace),  en definitiva, que la Tierra no es un planeta  -planeta significa en griego errante-  pues está situada en el preciso baricentro del universo, y por el efecto giroscópico está preservada de todo movimiento debido a torques externos. En otras palabras, el modelo planetario correcto es el que defendió el astrónomo danés Tycho Brahe (con ligeras modificaciones), y que fue también el que adoptaron los jesuitas para enseñar en las universidades de toda Europa.
Una referencia de tal libro la podéis ver en la siguiente dirección:

<http://www.lulu.com/content/libro-tapa-blanda/sin-embargo-no-se-mueve-%28edici%c3%b3n-1%29/13596252>
Desde esta dirección pueden ustedes comprarlo.  El libro está indicado especialmente para católicos con buena formación en ciencias (según la educación clásica).

  En formato ebook puede comprarse en:
 < http://ocio.elcorteingles.es/ebooks/ebook/y-sin-embargo-no-se-mueve-ebook-9781629347226>