Einstein tenía todo en contra para mantener su teoría de Relatividad Especial. Las consecuencias que se desprendían del efecto Sagnac contradecían claramente su principal postulado, la invariancia de la velocidad de la luz. Ya en 1915 tenía completada su Teoría de la Relatividad General[1], en la que había hecho una apuesta arriesgada: la equivalencia entre un sistema acelerado y un campo gravitatorio, lo cual equivalía a que el espacio-tiempo se deformaba ante la presencia de un campo gravitatorio. Todo ello quedaba muy bien en la teoría matemática, pero ahora necesitaba desesperadamente una prueba. Einstein había sugerido que tal prueba podía ser los rayos de la luz curvándose debido a la acción gravitatoria. A pesar de que una desviación en los rayos debida a la gravitación no representaba una prueba concluyente (teorías no relativistas también podían explicarlo[2]). Entonces una oportunidad parecía presentarse con ocasión del próximo eclipse solar del 29 de Mayo de 1919. Al menos eso indujeron a creer al público a medida que se acercaba esa fecha.
Aquel eclipse ha sido el acontecimiento científico más mediático de toda la historia. Todos los periódicos publicaban artículo tras artículo sobre el acontecimiento, en general, presentándolo como un combate entre Newton y Einstein, entre la vieja ciencia y la nueva ciencia. Pero entre los científicos heliocentristas se hallaba una aspiración secreta a alejar definitivamente de la ciencia la sombra amenazante del geocentrismo. La Royal Astronomical Society of London organizó dos expediciones, una a Sobral (Brasil) y otra a la isla Principe (Africa occidental), para hacer con más fiabilidad las mediciones del posible desvío de la luz de las estrellas cercanas al sol. Al frente de la de Principe iba el famoso astrofísico sir Arthur Eddington, un entusiasta de la teoría de la Relatividad[3], que además estaba convencido de que era correcta.
La idea era fotografiar el sol eclipsado con las estrellas cercanas a la periferia, las cuales se deberían encontrar ligeramente desviadas de su posición original. Einstein había calculado, utilizando una fórmula muy simple de óptica, que la desviación de las estrellas de la periferia del sol debía ser de 1,75 segundos de arco. Cuando en una entrevista le preguntaron sobre lo que haría si los resultados del eclipse no le favorecieran, respondió con una famosa grosería: “Entonces yo me preocuparía por el Señor, porque la teoría es correcta”.
Por fin llegó el 29 de Mayo de 1919 con su eclipse. Muchos pensará que todo el experimento se realizó a la perfección, pues hoy hasta a los niños les cuentan en la escuela primaria que ese eclipse “confirmó la validez de la Relatividad”, pero la verdad es bien distinta, tal como se desprende de las recientes investigaciones de Charles Lane Poor y otros[4]. Para comenzar, ese día estaba lloviendo en Principe, ante el desconsuelo de Eddington. Sólo después de estar ya avanzado el eclipse, entre las nubes, pudo divisarse el disco oscuro del sol, lo que aprovechó Eddington para obtener algunas placas fotográficas de una calidad pobrísima, según Clark [5] sólo siete eran salvables. En Sobral habían tenido mejor suerte, pero Poor ha descubierto que Eddington rechazó el 85% de los datos fotográficos debido a “un error accidental” no especificado. En realidad, Eddington, convencido de la validez de la Relatividad, desechó, considerándolos espurios, aquellos desplazamientos mayores o menores que 1,75". Pero la verdad es que cada estrella tenía un desplazamiento diferente, que no coincidía ni en magnitud ni en dirección a lo previsto por Einstein (la Relatividad predecía un desplazamiento radial). Todo se llevó de forma que la opinión pública creyera que los datos del eclipse concordaban con la Relatividad, y así Albert Einstein fuera encumbrado a la élite de la sabiduría humana. De esta manera el resultado definitivo fue proclamado por sir Arthur Eddington:
«… el resultado obtenido (para la deflexión de la luz desviada en el limbo del sol) puede ser escrito como 1.61”±0.30” .»[6]
Pero el lector se estará preguntando si desde 1919 hasta hoy no se han hecho otras mediciones más fiables de tal desviación. La repuesta va más allá de un ‘sí’ o un ‘no’, porque el peso de un científico como Einstein –y de una teoría como la Relatividad- es de tal calibre que mediatiza los resultados. Para expresarlo mejor veamos unos ejemplos:
Eclipse de 1929 (Sumatra)
Medición 1: 1.62”- 1.87”
Medición 2: 2.12”-2.37”
Medición 3: 1.80”- 2.20”
Medición 4: 1.85”-2.05”
Eclipse de 1936 (Rusia y Japón)
Medición 1: 1.62”- 1.87”
Medición 2: 2.12”-2.37”
Medición 3: 1.80”- 2.20”
En definitiva, los datos nunca muestran el valor 1.75 de Einstein, sin embargo, los resultados científicos suelen ser expresados en forma de 1.77”±0.40” , o similar, debido a la autoridad condicionante de Einstein y su Relatividad.
NOTAS
1. Einstein reconocía que la Relatividad Especial no podía dar cuenta de un sistema no inercial, esto lo confió a la Relatividad General, sin embargo, ésta tampoco puede explicar el efecto Sagnac.
2. Newton ya había sugerido que la luz también estaría sujeta a la gravitación. El propio Einstein pensaba que la desviación de la luz de las estrellas por la gravedad del sol sería parte por la g de Newton, y parte por la deformación espacial de la Relatividad General. Además está la desviación por refracción al pasar la luz por medio del entorno solar, pero además de ello hay que añadir, como indica Dr Henry Norris Russell, la desviación por errores de medición (deformación de los prismas, lentes y sistemas del telescópio).
3. En aquel tiempo se decía que sir Arthur Eddington era el único, junto a Einstein, que verdaderamente entendía las profundidades de la teoría de la Relatividad. Llegó a escribir un libro “The Theory of Relativity” que divulgativamente fue la mejor obra sobre la materia.
4. Más datos en http://einstein52.tripod.com/alberteinsteinprophetorplagiarist/id9.html .
5. Clark, “Einstein: The Life and Times”.
6. Debe observarse que a pesar de los ajustes realizados por Eddington, el error con que se presentan los datos es de un 20%, y en la práctica invalida totalmente el experimento.
Una pregunta: ¿Ud. niega que la tierra gira sobre su eje? ¿Cómo se explican el día y la noche? ¿Y las estaciones del año?
ResponderEliminarJuan,
ResponderEliminarProbablemente ningún científico habría descubierto jamás la causa correcta de las estaciones si no hubiera tenido revelaciones divinas santa Hildegarda. En realidad la causa no es la inclinación de 23.5º del eje terrestre como la ciencia supone (una hipótesis jamás probada), sino un doble movimiento rotatorio del firmamento.
“…En virtud del poder de revolución del firmamento, el sol es llevado en una órbita inclinada de este a oeste, a través de sur, aunque en su viaje deba esforzarse en moverse en contra del movimiento del firmamento” (Santa Hildegarda, “Die götllichen Werke”).
Para comprender el movimiento del sol hay que imaginar dos ejes perpendiculares a una tierra inmóvil, en torno al perpendicular (Norte-Sur de la tierra) gira el firmamento una vuelta/dia; y perpendicular a él, está el eje NS del universo, en torno al cual gira también todo el firmamento una vuelta/año. Lo mejor sería verlo en un gráfico o animación, pues el movimiento de sol y todo el sistema solar es una combinación de dos movimientos rotatorios, respecto al NS terrestre es fácil imaginarlo, es el movimiento celeste que vemos por la noche; en cuanto al movimiento perpendicular, podemos imaginar un eje horizontal (como el que se utiliza para asar los pollos), en éste el sistema solar (el sol y todo el plano de la eclíptica) gira un total de 47º (0.2568º por día). Así hacia el 24 de Diciembre, el sol está en su posición más baja (23.5º hacia abajo del ecuador) con lo cual es verano en el hemisferio sur terrestre, luego comienza a girar (ascendiendo) durante 6 meses hasta llegar al punto más alto (23.5º por encima del plano del ecuador) es el verano en el hemisferio norte. Es curioso, que en la imagen de la Virgen de Guadalupe, milagrosamente aparecida en la tilma de Juan Diego, en 1531, según las constelaciones de su capa, la Virgen María está orientada perpendicularmente al eje Norte-Sur terrestre, lo cual podría ser extraño, a no ser que su orientación fuera el eje del universo, precisamente el perpendicular al NS. Por otra parte, intuitivamente el doble movimiento solar se aprecia bastante bien en el efecto llamado “analema solar” (buscarlo en google). De cualquier modo, próximamente escribiré una entrada sobre el asunto de las estaciones, aunque lo más costoso será hacer unos gráficos adecuados.
¿En la web se puede encontrar la obra completa de santa Hildegarda donde habla de la creación?
ResponderEliminar¿Cuál es la distancia de la tierra al sol y de la tierra a la estrella más cercana (su opinión) y cuál es la velocidad de las estrellas?
Hola Juan,
ResponderEliminarSanta Hildegarda escribió su abrumadora cantidad de escritos en alemán medieval. Algunos sí pueden encontrarse en la web, en inglés o en español, pero lo más abundante está en alemán moderno (desgraciadamente algunos como yo desconocemos este idioma). Tal sucede con los temas concernientes a este blog, sobre la cosmología y formación del universo el científico alemán Dr Helmut Posch, en su libro “Das wahre Weltbild nach Hildegard von Bingen” hizo una traducción y un profundo análisis interpretativo, pero me parece que no hay traducción ni a inglés ni a castellano de este libro. Robert Sungenis, para su obra “Galileo Was Wrong…” realizó una traducción al inglés de alguno de sus capítulos.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarProfesor Gorostizaga:
ResponderEliminarContrariamente a los que le oyen defender el geocentrismo, y sin más, le empiezan a insultar, yo quisiera saber más del asunto.
Me está pasando lo mismo que con el tema del Diseño Inteligente, que antes de reirme de esas ideas, me puse a curiosear en ellas, y las encuentro muy razonables.
Por favor, dígame dónde puedo sacar la más veraz defensa del geocentrismo, aunque sea en inglés.
No me importaría ver a Einstein arrastrado por los suelos (a Darwin y los de su secta yo los tengo ya hace decadas por muertos, eso sí revolviéndose en sus sepulcros y saliendo a asustar por las noches, como unos zombis "científicos"), pisoteado por Sagnac, o por Hildegarda, o quien diga la verdad.
Gracias anticipadas por su respuesta
Hola Juan ara,
ResponderEliminarSin duda la mejor exposición sobre el geocentrismo está expuesta en la extensa obra "Galileo Was Wrong, the Church Was Wright" por los doctores católicos Robert Sungenis (Teólogo) y R. Bennett (Físico) de la Catholic Apologetic International. Puedes comprarlo en su web.
http://www.catholicintl.com/
¿Tu como sabes que ese dia de otoño de 1919, el cielo se lleno de nubes complicando la visualizacion del cielo? ¿Te lo confio extraoficialmente algun tripulante del Sr. Eddington? ¿Por que en los colegios cristianos enseñan fisica relativista? No estoy en contra del creacionismo, esas son las dudas que surgen cada vez que leo estos articulos.
ResponderEliminar